La ciudad de Torrevieja está plagada de deportistas del más alto nivel, algunos que incluso pueden ser olímpicos este próximo verano en Tokio. Sus instalaciones son la envidia de la Vega Baja y la 2020/2021 ha sido especialmente brillante dentro de la vorágine de la pandemia.
Pero el lunar del fútbol persigue a sus ciudadanos y aficionados en los últimos años. Impagos, desapariciones, descensos y un largo etcétera que ha convertido al deporte rey en poco menos que un lacayo comparado con otras disciplinas.
El Sporting Costablanca tiene este domingo (18:30) la oportunidad de dar el primer paso para devolver la esperanza futbolera a la ciudad de la sal. Si consiguen la victoria contra el Guardamar Soccer CD significaría proclamarse campeones de liga y ascender directamente a Primera Regional.
El conjunto es un recién llegado a nuestro fútbol y está firmando números para guardar. Solo una derrota al principio de la liga y 16 triunfos consecutivos desde entonces. La 17ª vale un título de liga y el éxito del proyecto dirigido por Carlos Pérez.
Eso sí, enfrente tendrán un hueso. El Guardamar Soccer llega de empatar al Atlético Algorfa y quiere ser el juez del Grupo 17 de la Segunda Regional. Propuesta ofensiva y un partido sin tregua para retrasar el alirón del Costablanca.
FOTO: SPORTING COSTABLANCA
