No hace mucho dije que en Orihuela hace falta una pista de atletismo y la respuesta fue: si pudiera pedirles una carta a los reyes magos, la tendríamos.
Pero una pista de atletismo en la capital de la Vega Baja es un pensamiento tan mágico como los reyes magos.
Pongámonos en contexto, cerrar los ojos e imaginar unos niños jugando al fútbol en dos porterías puestas en la calle, jugar al frontón en la pared de un edificio o hacer escalada en un árbol.
Bien, pues esto que parece inimaginable, sucede en el atletismo, su campo de batalla es la calle. Para quien puede, porque dentro del atletismo hay otras disciplinas como lanzamientos o saltos que se realizan en plantones donde no hay ni una mínima seguridad, ni tan solo una jaula que proteja a quien pase por alrededor.
Hace no mucho leí un recorte del Marca, el diario deportivo más famoso de España. Dos páginas ocupaba aquel titular; Orihuela la ciudad del siglo XXI. En ella venia todo el plan que tenía Orihuela para crear una ciudad deportiva con su pista de atletismo a principios de siglo y ser una pionera en la Comunidad Valenciana.
En estos momentos aquel periodista que escribió la noticia paseará por las calles de Orihuela algún día de estos y si tuviera que poner un titular al estado de las instalaciones deportivas de la ciudad, debería de ser Orihuela la ciudad del siglo XX.
Aún así, aquí, en Orihuela, en la ciudad del siglo XX, el mayor nivel que se puede observar en el deporte es en atletismo. A ver en qué deporte tienes una atleta preseleccionada para unos JJOO o jóvenes que disputan sus campeonatos de España cada año luchando por las medallas, eso sí que es un regalo mágico.
Aquí os dejo una pregunta.
Si hubiera pista de atletismo, ¿dónde estaríamos?
Carta a los “reyes magos”
Un tartán donde correr.
Esteban Ortuño.