Despedidas las hay de todo tipo. Más o menos lacrimógenas, de las que sabes que habrá reencuentro, las que guardas la mínima esperanza, para siempre con la boca pequeña o portazo definitivo y sin vuelta atrás. Casi tantas como relaciones humanas.
El futbolista oriolano Yoel Albarracín colgaba las botas después del ascenso del CFP Orihuela Deportiva a Primera Regional. Un adiós al club y la afición que le había acompañado en las últimas gotas de su fútbol y que disfrutó de sus goles y entrega como uno de los capitanes y máximos anotadores históricos.
Nadie hubiera apostado más allá de unas cuantas monedas a que sus caminos volvieran a cruzarse y menos aún a que sería en bandos enfrentados. Cambiando el negro y amarillo por el rojo y el número 7 por el 14. El Palmeral por el Montesico Blanco.
Deportiva y Racing San Miguel despiden la temporada este sábado a las 18 horas con los dos equipos ya salvados. Un pulso que se vivirá en San Miguel de Salinas y que tendrá un tinte nostálgico. Un capricho del destino y del fútbol en la Vega Baja.