Algunos pueden pensar que el título es un tanto exagerado, fuera de lugar o irreal, pero nada más lejos de la realidad, a día de hoy ser atleta en Orihuela es muy difícil, y vamos al lío.
Por los tiempos que corren, raro es que una ciudad no tenga instalaciones deportivas a su medida, pocas son las que carecen de ellas. Incluso he llegado a ver bastantes pueblos con unos complejos envidiables y para nada exuberantes ni costosos.
Muchos o muchas pensarán: “qué exagerado hombre, en nuestra época sin instalaciones estábamos en lo más alto”. En vuestra época. Ahora mismo, el no tener unos mínimos emplazamientos es resultado de un hándicap gigantesco. Y no conozco (y me encantaría) a ningún atleta profesional que no entrene en una pista de atletismo o mínimo, que no la toque un par de meses al año. Sí, los africanos sí tienen pista de atletismo, de tartán o de ceniza, pero tienen sus 400m de cuerda bien delimitados y no un intento de pista, con forma de huevo, con medidas un tanto extrañas y una curva en el que la fuerza G es la que podría sufrir un Fórmula 1.
Tras 12 años de muchos kilómetros por tierras oriolanas y alrededores, con una ilusión en la que cada año es mayor, mi querida madre del atletismo, Lola Sánchez me aconsejó que saliese, que al fondo de este túnel no hay luz. Créanme, estoy seguro de que fue más doloroso para ella que para todos los afectados. Se trata de un proyecto en el que llevas más de una década involucrada, para que un día veas que todo eso puede llegar a marchitarse en esta huerta, duele, tienes que dejarlo ir, y lo peor, es que el refrán de: Nadie es profeta en su tierra, vuelve a chocarse contigo.
No es la primera vez, antes de mí vinieron muchas compañeras y compañeros que tuvieron que salir, una muy buena amiga que hoy está en los focos principales del atletismo español. No es solo eso, yo no soy el único, otros dos grandísimos atletas han tenido que salir, y créanme, darán mucho que hablar. Pero, el principal problema, es que no voy a ser el último en salir, desgraciadamente dentro de 3 años volverán a tener que marcharse más atletas, dentro de 5, de 10 y así sucesivamente hasta que se permita hacer un complejo deportivo en condiciones.
No será por gente que lo quiere, no será por gente que lo ha luchado, no será por gente que ha estado a punto de conseguirlo es, desgraciadamente, por la gente que mira hacia otro lado y machaca sin complejos los sueños de las personas y de la ciudad de Orihuela. No se den por aludidos, los que son culpables de esto saben perfectamente que me refiero a ellos, y no solo eso, muchos sabemos de quiénes se tratan.
Por otra parte, y dejando atrás este tema, quería comentarles cómo ha sido la entrada en el jardín idílico en el que conseguido insertarme. Ahora mismo comparto grupo con uno de los mejores bloques de entrenamiento de la Región de Murcia, y posiblemente, de España. Con un entrenador revelación, joven, pero a la vez experto, y con las mismas ganas de mejorar que la de sus atletas.
No solo eso, tanto en la parte del trabajo de fuerza como en la alimentación tengo las espaldas muy bien cubiertas, cuando profesionales de este calibre te conocen y saben planificar no desconfías, tu mente está relajada y centrada. Eso es importante, cuando el de arriba está contento y disfruta, es que estás haciendo las cosas bien y vas por buen camino, no descuiden a su cabeza, que, aunque no tenga piernas, es el que más corre de todos.
Me gustaría que estas líneas sirvan de ayuda para atletas actuales y futuros. ¡Qué importante es entrenar en grupo! Por favor, conseguid un grupo amplio, que haya buen ambiente y con un objetivo claro. ¿Los entrenamientos? Mucho más fáciles. ¿Los ritmos? Muchos más rápidos. ¿La adherencia al entrenamiento? Mayor que cuando te persigue tu sombra. Lo mismo puedo decir de una pista de atletismo, todo más fácil, todo más real. Porque hay algo que es obvio, la obra se ensaya donde se expone, una actriz no ensaya en un bosque si la obra se representa en el teatro, un atleta no entrena entre caminos si compite en una pista. Muchos sabrán este dicho: “La pista te pone en tu sitio”. ¡Qué gran verdad! Te es sincera contigo, te enseña la realidad y te comenta tu estado de forma actual. La verdad a veces duele, pero es necesaria.
Para concluir con este artículo, simplemente quería hacer un llamamiento a los más pequeños: Haced deporte, disfrutad de él, haced amistades, serán inseparables, jugad, divertíos, moveos, no hay mayor calidad de vida que la que da el deporte, no hay mayor chute de endorfinas, de experiencias, de sueños… y de realidades. Por favor, padres y gente de la que dependa el futuro deportivo de nuestra ciudad, enseñad el deporte, jugad con él, hacedles conocer el deporte, todas sus variantes, todas sus vertientes, pero, os ruego, enseñadles y otorgadles un lugar en el que puedan realizarlo. La obesidad infantil ya está demasiado alta como para seguir haciéndola crecer.
Fer Moya.