A unos 15 km de su habitual hogar se jugará el ascenso el CFP Orihuela Deportiva. Será en el Campo Municipal de San Fernando de Cox, el campo de su máximo rival esta temporada. Allí será el todo o la nada. Subir de categoría por primera vez en su historia o quedarse a las puertas.
El rival volverá a ser la Balompédica La Cueva de Castellón. Los oriolanos afrontan la vuelta de la eliminatoria con una renta mínima de 0-1 obtenida el pasado sábado. Un resultado que hace creer pero que no asegura nada.
Después de quedarse a menos de un milímetro de ascender directamente, el Orihuela Deportiva tiene ante sí la segunda oportunidad. También la última esta temporada. 10 meses después de empezar el proyecto de la 2018/2019, una de las plantillas más completas de los 15 grupos de la Segunda Regional tiene ante sí su gran reto.
Jugadores curtidos en mil batallas se enfrentan quizás a la más especial de sus vidas. Algunos a la última. A las órdenes de Mario Tormo, el factor defensivo volverá a ser clave en un equipo que no calcula. Que ha recibido los golpes más duros en El Palmeral pero que no especula sea cual sea el resultado o la ventaja.
Las circunstancias han hecho que el partido de sus vidas sea en Cox. En el «exilio» como lo han llamado sus hinchas. Los que llenaron de negro y amarillo las gradas de Castellón, los que lloraron de rabia en El Saladar y los que hacen más fuerte al club.
Este sábado a las 19:30 horas el Orihuela Deportiva quiere escribir una nueva página en su todavía corta historia. De un partido depende que sea la más gloriosa o la más dura. Pero seguro será la más leída.