La última bala del Bigastro acabó con la imbatibilidad en casa del Cox. A falta de cuatro jornadas para el final el equipo de Juanan Cases pierde su condición de invicto en el Municipal de San Fernando en un partido merecedor de otra categoría. Ocasiones, alternativas en el marcador, juego directo, tensión en la grada, polémica arbitral y un total de 7 goles.
Siete goles que provocan un terremoto en la zona alta de la clasificación. El Cox, que había cogido el liderato en la pasada jornada, lo pierde una más tarde en favor del Orihuela Deportiva.
El partido empezaba a favor de los locales. Kevin adelantaba muy pronto al Cox con un buen desmarque a la espalda de la defensa del Bigastro y ponía el 1-0 de tiro cruzado. El Bigastro empataba pero el Cox se volvía a adelantar con una vaselina de Carmelo. Pero justo antes del descanso en una falta al borde del área Emilio hacía el empate a 2 con el golazo del día.
A la vuelta de vestuarios el Bigastro puso una marcha más y dio la vuelta al partido con el 2-3. Ahí el Cox sacó carácter y subió líneas. Los locales perdieron varios jugadores por lesión y Josué se elevó hasta el cielo para empatar de cabeza tras una falta lateral.
Cuando el partido ya agonizaba, el Bigastro buscó el milagro. El empate le dejaba fuera de la lucha por el ascenso y encontró el premio con un gol en propia puerta de los locales. 3-4 final, cambio de líder, un cuarto equipo que no renuncia y un final de temporada de infarto.
