Javier del Cueto es un jugador oriolano de fútbol que ha pasado por equipos de la Vega Baja como el CD Murada, CD Almoradí, Orihuela CF o FB Redován. Esta temporada decidía dar un paso al lado y aparcar el fútbol por la pandemia de Covid-19 y hoy se asoma al Palco de 3D VEGA BAJA para contarnos su experiencia.
Un año ha pasado desde que a todos nos cambiara la vida por completo la pandemia del Covid-19, un año de dudas, incertidumbres, miedos, pero también de esperanzas de volver a la vida que teníamos antes del estado de alarma de aquel mes de marzo de 2020.
Personalmente ha sido un año de cambiar los terrenos de juego, por entrenamientos de fuerza en casa, jornadas de carrera continua kilométricas en solitario, fartleks y rutas de montaña para mantener la forma, deseando que el proceso de inmunización se acelere para recuperar todo aquello que nos está arrebatando la pandemia y por supuesto, poder seguir disfrutando del fútbol.
Y es que, remontándome al verano de 2020, éramos muchos los jugadores de categorías no profesionales los cuales teníamos dudas acerca de cómo se desarrollaría la temporada, en qué medida afectaría a la vida laboral de cada uno en caso de que hubieran casos positivos en el equipo distintas semanas, con la correspondiente cuarentena que conlleva el haber tenido contacto estrecho con un positivo, dudas sobre si la temporada acabaría suspendiéndose como la pasada, dudas sobre qué protocolo habría en función de la evolución de la pandemia… un protocolo que por parte de la federación, ofrecía y sigue ofreciendo pocas garantías, sin ni siquiera test previos a los partidos en un deporte de contacto como es el fútbol.
No obstante, el balón echó a rodar y algunos decidimos dar un paso al lado por estas dudas, pero sobre todo por el miedo a contraer la enfermedad y contagiar a personas de nuestro entorno más cercano las cuales son de alto riesgo, bien sea porque son mayores, porque padecen de enfermedades crónicas o ambos casos a la vez.
Estas son circunstancias muy personales que cada uno debe sopesar y decidir finalmente si los beneficios que te van a aportar son mayores a los riesgos que puedes correr, en mi caso siempre lo he tenido claro desde el principio y a pesar de que los datos dicen que las actividades deportivas representan un porcentaje bajo de contagio, la mayoría de equipos tanto de Regional Preferente como de Tercera división se han visto involucrados en suspensiones de partidos, casos positivos en plantilla, cese de actividad, cuarentenas…
Y sí, seguramente esos contagios se habrán producido en otros entornos, pero volvemos a lo de antes, la balanza está inclinada hacia evitar este tipo de situaciones, mientras tanto seguiremos cuidando lo máximo posible de aquellas personas que durante toda nuestra vida han cuidado de nosotros.
Ah, y por supuesto seguiremos entrenando, ya queda menos.
