En algunas culturas existe la firme creencia de que romper un espejo es sinónimo de mala suerte. Una maldición que incluso se prolongaría hasta los 7 años. Nada más lejos de la realidad para un Orihuela CF desde este domingo 4 de febrero.
El día en el que el Campo Municipal de Los Arcos presenciaba la exhibición de Diego Espejo. Un central recién llegado en el mercado invernal del Atlético de Madrid que ha dado la victoria a los suyos con un doblete antológico en su nueva casa.
Espejo se besaba el escudo después de un disparo al palo largo del portero del Palo y de una media chilena que hizo frotarse los ojos a los presentes. Goles que también enseñaban la ambición de los de Sergi Guilló después de jugar buena parte del partido con 10 jugadores por expulsión de Mendi y de ver cómo le anulaban un tanto completamente legal.
O con 10 y medio gracias a la afición tal y como señalaba el técnico en sala de prensa. También incidiendo en que los de hoy son más que tres puntos. Es mirar más hacia el ascenso que al descenso y pegar un buen mordisco a algunos rivales directos.
🅷🅸🅶🅷🅻🅸🅶🅷🆃🆂
— El Palo FC 💙⚽️ (@ElPaloFC) February 6, 2024
Aquí os dejamos el resumen del partido del pasado domingo en Orihuela 🎥 ⚽️#SubelaMarea pic.twitter.com/DN6fHiHvBd
