Los golpes asestados al deporte de la Vega Baja durante la mayor parte del 2020 y el principio del 2021 han sido profundos y en muchos casos irreparables. Las buenas noticias llegan con cuentagotas y son celebradas como merecen.
Las categorías inferiores son las que más están sufriendo las restricciones para frenar el avance de la pandemia en la Comunidad Valenciana. Y es que los más pequeños fueron los primeros en ver detenida su actividad.
El Club Balonmano Torrevieja Mare Nostrum sigue compitiendo con su primer equipo en el Grupo E de la Primera División Nacional. Los de Antonio Cámeron son un equipo con sello propio en el que todos los jugadores son naturales de la ciudad salinera.
Además, uno de ellos está brillando con luz propia pese a su juventud. Naim ya es una realidad y uno más en la plantilla del primer equipo pese a que todavía está en edad juvenil. Este mes de febrero está siendo el de su confirmación y ya se ha estrenado como goleador. Con 16 años y un físico portentoso, el balonmano de la Vega Baja pasa por sus manos.