“El equipo necesita una victoria, luego vendrá el resto”. Fue el primer mensaje de Machuca al volver a sentarse en el banquillo del Orihuela CF. Un triunfo conseguido el pasado fin de semana ante el Espanyol B y refrendado este domingo en Olot.
Y de nuevo fue encajando un golpe directo al mentón. Los locales se adelantaron a los 10 minutos de partido y jugaron en su terreno la primera parte. Sin dominio de juego pero con las llegadas más claras.
Machuca movió la pizarra tras el descanso y el efecto no tardó en llegar. Toché entró en el 56 por Solano y goleó en el 59. Llegar y besar el santo para el contrastado delantero. Apenas cinco minutos más tarde apareció el capitán.
Chechu Flores culminó la remontada y Marí puso a balón parado el 1-3 definitivo para dar tres puntos más al Orihuela CF. No ganaban fuera desde el 31 de octubre en Atzeneta. El milagro está más cerca y el acto de Fe ya es una realidad.