El Palmeral de Callosa de Segura no pudo recibir a lo grande al filial en la vuelta de la Primera Regional tras tres meses de parón competitivo. Una vuelta a puerta cerrada pero que no afectó a los locales.
El Callosa B sigue creciendo con Joaquín Rives en el banquillo. Este sábado bastó una gran primera parte para meterse en el bolsillo tres puntos vitales en la lucha por la permanencia en el Grupo 10.
El tridente formado por el juvenil José Antonio Martínez, el capitán Álex Bonillo y Valentín fueron una pesadilla para la defensa rival. Un cabezazo certero y una contra mortal acabaron con el partido antes de la primera media hora.
La segunda parte fue de trámite. El marcador no se movió y El Palmeral se queda con tres puntos importantes para el filial. La escalada continúa para el Callosa B.