253 días llevaba el Orihuela CF sin conocer el sabor de la derrota. Prácticamente había olvidado lo que era perder desde aquel 1-0 en Atzeneta del 15 de diciembre de 2018. Aquel partido fue la antesala de un equipo que destrozó todos los récords positivos propios y ajenos y que terminó consiguiendo el ascenso a Segunda División B.
Este domingo debutaba en el campo de la SD Ejea y vivió en sus propias carnes el dicho de que los principios nunca fueron fáciles. Una goleada quizás más abultada de lo visto en el terreno de juego pero que devuelve a la realidad a un equipo que había vivido instalado en los sueños. Por méritos propios el Orihuela CF se había acostumbrado a ganar y dominar, pero el Ejea no tuvo piedad.
Con apenas 6 minutos de juego transcurridos, Manu Molina hizo el 1-0 para los locales. El equipo escorpión intentó empatar antes del descanso con llegadas de José Carlos y Brian y con tentativas a balón parado pero el resultado no se movió.
La segunda parte fue una pesadilla para los de Villafaina. Otro gol poco después de salir de vestuarios supuso el 2-0 obra de Torras. 2 minutos después el ex jugador del Tarazona Ballarín cumplió su particular venganza e hizo el 3-0.
Villafaina intentó cambiar la tendencia dando entrada a Nico, Chechu Flores y Luis Gilabert, pero la remontada estaba demasiado lejos. De hecho fue el Ejea quien a través de Ramón López volvió a ver portería para dejar el definitivo 4-0.