La Primera Regional de la Vega Baja vivía este lunes la segunda variación en sus banquillos en apenas una semana. El Sporting Dolores cogió el relevo del CD Benijófar para tomar la decisión de separar su camino del que era hasta ahora su entrenador Aitor Gonçalves.
«»Lo primero es dar las gracias por la confianza que me dieron en verano pero esa confianza no ha seguido durante la temporada. A mi en la jornada tres ya se me dijo que si no ganaba la siguiente estaba fuera. Para mi que después de tres meses de trabajo te quieran echar, rompió mi relación con el club», apuntaba el técnico en SER Deportivos Vega Baja.
«Esto era un proyecto a medio largo plazo, la idea era firmar gente del pueblo para que cada año no tuviéramos que hacer todas las fichas nuevas. Hemos optado por la juventud, había la opción de un filial y de sacar los juveniles. Yo quería terminar la temporada por los jugadores pero no por el club», explicaba Gonçalves.
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