La cuesta de enero va a ser especialmente dura en el mundo del fútbol en todas sus categorías y edades. Los equipos tendrán que adaptarse a las circunstancias y convivir con la incertidumbre y el aplazamiento constante de partidos.
En la 2020/2021, el Orihuela CF de Gerard Albadalejo se vino abajo después de las fiestas navideñas precisamente por ello. El buen primer tramo de temporada quedó en nada al volver de las vacaciones y el bajón fue más que evidente.
Esta vez ha sido el Callosa Deportiva el que ha iniciado el año con mal pie en este sentido. Su primer partido del 2022 tuvo que posponerse debido a un importante brote de contagios localizado en el Torrellano, rival de los callosinos para abrir el año.
Y apenas días después era el propio vestuario de la Vega Baja el afectado por el virus. El club informaba este martes de que en los test realizados a la plantilla se habían encontrado 7 casos positivos, por lo que se tienen que aplazar también sus encuentros ante el Villarreal C y el Torrent CF.