La llegada de Gil al banquillo del Callosa Deportiva B ha agitado la disciplina de un equipo que sufrió hasta el último suspiro de la temporada pasada.
El filial callosino estuvo durante muchos minutos a un solo gol de caer a la Segunda Regional pero finalmente resistió.
El cambio de ciclo en toda la estructura del club es más que evidente y toca de lleno al B. Muchas caras nuevas han llegado con el nuevo entrenador. Una inyección de ilusión y ganas de disfrutar sobre el campo.
La aventura empieza en un derbi contra el Catral. Un partido que abre el fuego y que se prevé vistoso.
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