Muchos meses de competición con el consiguiente desgaste que afecta especialmente a la figura del entrenador. La Vega Baja vive una turbulenta 2024/2025 en los banquillos y esta semana alcanzaba los 10 movimientos en lo que llevamos de curso.
El Orihuela CF ha sido la principal protagonista en cuanto a institución. Destituyendo a José Ramón Rodríguez para dar las riendas del primer equipo a Pato, con la dimisión de los hermanos Cases en el filial Benferri CF y la posterior llegada de Aroca y precisamente cambiando a Aroca por Samu Casado en el Juvenil de Liga Nacional.
La máxima categoría de nuestro fútbol regional sí ha resistido a este tipo de decisiones. Carlos Canales, Raúl Mora y José Antonio Gil siguen atados en los proyectos de Redován, Thader y SC Torrevieja pese a las mejores o peores dinámicas que hayan atravesado.
Especialmente dañina para los técnicos ha sido la campaña en el Grupo IV de Primera FFCV. El Catral fue el primero en tomar medidas y cambiar a Edu Barceló por Abel Sánchez, el Callosa cortó la era Chicha y le dio las llaves a Óscar Fornés y la última noticia ha sido la decisión de Avilés en el SanFul. Sumado al mencionado cambio en el Luis Rocamora de Benferri.
En nuestra Segunda FFCV solo dos destituciones han tenido esta temporada. El Algorfa terminaba pronto con la etapa de Pedro Lara para apostar por Óscar Martínez y el Albatera Sporting cesaba a Aitor Gonçalves para confiar en un hombre de la casa como David López ‘Dewi’.
En la última categoría de nuestro fútbol regional han sido dos filiales los protagonistas. Con la salida de Alejandro Solano y el regreso de Carlos Pérez al SC Torrevieja B y el cambio de David Sáez por Borja Galán en el FB Redován B.
En total: 10 terremotos en los cuerpos técnicos de nuestra comarca. Algunos antes, otros después, con más o menos efecto pero todos buscando un revulsivo personal o colectivo. Y 3 meses de competición por delante para posibles nuevos movimientos.